29 de septiembre | Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos

Súmate a la reducción de los desperdicios de alimentos

Súmate a la reducción de los desperdicios de alimentos

Reducir las pérdidas y desperdicios de alimentos (PDA) impacta de forma positiva en el clima, la seguridad y los sistemas alimentarios. Es por esto que el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 12 adoptado por las Naciones Unidas, sobre consumo y producción sostenibles, en la meta 12.3, proponía reducir, al año 2030, a la mitad el desperdicio de alimentos per cápita a nivel mundial en la venta al por menor y a nivel de los consumidores, y reducir las pérdidas de alimentos en las cadenas de producción y abastecimiento. Reducir las PDA beneficia al medio ambiente ya que se reducen las emisiones de carbono, gases con efecto invernadero, se hace mejor uso de los recursos naturales, como agua y tierra de cultivo y mejor utilización de los recursos humanos implícitos en la producción de alimentos.

Fomentar el cuidado al planeta desde edades tempranas es fundamental: los niños y niñas tienen un rol muy importante como agentes de cambio. Para esto, es muy importante

  1.  Incentivarles desde pequeños a valorar las frutas y verduras y alimentos en general
  2.  Motivar el consumo de alimentos de carácter saludable y cuidar mejor de los recursos disponibles consumiendo, dentro de las frutas y verduras, todas aquellas partes factibles de ser consumidas como hojas, tallos y cáscaras
  3. Transmitir el mensaje de que aquellas verduras o frutas con alguna imperfección como moretones, manchas o formas “raras” son tan nutritivas como las demás
  4. Favorecer el acceso a huertas comunitarias o en los hogares para que ellos comprendan todos los recursos necesarios para producir este tipo de alimentos y en su adultez ellos sean capaces de cultivar también
  5. Enseñarles las porciones adecuadas que deben consumir para reducir los desperdicios como sobras; entre otras acciones.

Disminuir las pérdidas y desperdicios de alimentos también aporta beneficios a los consumidores: ahorro de dinero si se compra lo necesario, evitar así dejarse tentar por ofertas que muchas veces no son consumidas en su totalidad; comer porciones adecuadas contribuye a prevenir el sobrepeso; comprar los alimentos en cantidades adecuadas evita almacenar productos durante mucho tiempo, los cuales pueden vencer y causar, al ser consumidos, alguna intoxicación alimentaria.

Existen preparaciones en las cuales se utilizan hojas, tallos y cáscaras, las cuales son incluso más nutritivas que aquellas partes que solemos consumir. Por ejemplo, se pueden cocinar tallos de brócoli, alcachofa, coliflor y elaborar guisos o ensaladas con ellos, así el aporte de agua y fibra será mayor en su alimentación. Las hojas son una muy buena fuente de vitaminas y de compuestos bioactivos, como antioxidantes; por ende, se recomienda agregar aquellas que por lo general no se consumen, tal es el caso de hojas de betarraga, hojas de apio, hojas de zanahoria, entre otras.

Siempre que se puedan consumir las cáscaras se recomienda hacerlo, las cáscaras contienen incluso más capacidad antioxidante que las pulpas. Además, preferir manzanas, peras, ciruelas, duraznos y tomates, bien lavados con su cáscara es una buena idea para aumentar el contenido de vitaminas, minerales y fibra dietética en nuestra alimentación.

A continuación, se presentan algunos consejos para aumentar la vida útil de sus alimentos y reducir así los desperdicios:

  • Conserve las verduras de hojas como lechugas, espinacas, acelgas, etc., refrigeradas, lavadas y en recipientes herméticos con una hoja de papel absorbente en la base, esto permitirá que conserven su frescura por más tiempo.
  • Almacene los alimentos refrigerados separados unos de otros, ya que el aire fresco debe circular entre ellos para mantenerlos siempre a temperaturas de refrigeración adecuadas.
  • Aquellos alimentos con fechas de vencimiento más próxima, colóquelos en la parte más visible, para consumirlos antes de que caduquen.
  • La limpieza del refrigerador es indispensable a fin de evitar la proliferación de bacterias y hongos en los alimentos. Así también mantenga limpia la despensa y aquellos alimentos como arroz, fideos, harinas, legumbres procure almacenarlos en contenedores herméticos para evitar la contaminación con insectos como la polilla de la alacena.
  • Siempre que corte algunas fruta y verdura, evite dejarla a temperatura ambiente, es mejor refrigerarla en contenedores cerrados.
  • Respecto a la duración de las “sobras” de alimentos aconsejamos refrigerar y consumir antes de 3 días cualquier ensalada almacenada; los guisos, sopas y carnes cocidas antes de 4 días; las salsas antes de 2 días.
  • Si hay partes de los alimentos que no se pueden consumir, no la bote a la basura, busque alternativas para compostar y dar un nuevo uso a esos residuos, para que vuelvan a la tierra. Recuerde que los alimentos que van a los vertederos contribuyen a la producción de gases con efecto invernadero.
  • Comprar, almacenar y consumir lo justo va en beneficio de las personas, el planeta y las futuras generaciones.

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